La intérprete de "Rolling in the Deep" realiza ciertas revelaciones a la cadena de la NBC y confirma que no le gusta ventilar aspectos de su vida personal, sin embargo entiende que el hecho de ser una celebridad la obliga de alguna manera a ser confidente con su público y mantenerlo al tanto de sus actividades.
Una de sus batallas ha sido su peso y aunque se siente orgullosa de su figura, algunas veces ha caído víctima del desespero por lucir más estilizada. Ella confiesa que usó cuatro fajas, una debajo de la otra, durante su presentación en la entrega de los Grammy. Cuando le tocó el turno de cantar tuvo que prescindir de dos porque de lo contrario no le hubiera dado el aire.
Adele Adkins está considerada como la mejor voz del cancionero popular, esta mujer con curvas rompe el estereotipo de las llamadas "divas del pop" que han impuesto la moda de lucir estilizadas figuras y vestir arriesgados atuendos dentro y fuera de los escenarios.
La Adkins se ha ganado con todo derecho el nombre de "divina" y por ende a lidiar con todos los laterales que trae el reconocimiento. La música es su vida, aunque confiesa que no le gusta enfrentar los dilemas que conlleva la fama, pero está dispuesta a superar los inconvenientes tan sólo por complacer a su fiel público.
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